“Orellana me envió un mensaje con Iberico”

¿Luis Iberico lo buscó como
intermediario de Rodolfo Orellana? ¿Con qué fin?
Sí, para que tenga una
reunión con él, pero no creo que sea el mediador. Simplemente transmitía el
mensaje.
¿Con qué propósito?
No lo dijo, pero yo suponía
que para tratar temas vinculados a las denuncias que me hacía Orellana y que yo
respondía.
Para contextualizar, ¿de qué
época estamos hablando y en condición de qué se acercó Iberico a usted?
Él se acerca y me dice que
trae el mensaje de un amigo común de él y Orellana y que este quiere hablar
conmigo. Yo me sorprendí mucho. Nunca esperé ningún mensaje en cuatro años y
medio de lucha contra la mafia de Orellana, y me sorprendió también que el
mensajero sea Iberico.
¿Iberico le pidió que fuera
en su casa la reunión?
Hablamos de esa posibilidad,
pero, en realidad, lo que él (Orellana) buscaba era un lugar neutro que podía
ser la casa de Iberico o cualquier otro lugar. Le dije a Iberico: “Él
(Orellana) conoce mi vida, sabe a qué hora entro, sabe todo; entonces, si sabe
dónde estoy, adónde voy, qué lugares frecuento, a qué personas, si él lo sabe,
si quiere hablar conmigo, que me toque la puerta…
¿Informó de este tema a la
comisión Orellana?
Meses después, cuando cae
Orellana y tenemos que ir a entrevistarlo al penal de Piedras Gordas, yo le
pregunto si me había mandado un mensaje y él me ratifica y me dice: “Sí, le
mandé el mensaje con el señor Iberico”. Hay testigos, no es una cosa oculta, secreta,
y cuando le pregunté cuál fue el mensaje que le di a través de Iberico, me
respondió: “Que le toque la puerta, que vaya a su casa”. Le pregunté por qué no
lo hizo y me contestó: “Porque usted en su casa me hubiera matado”.
¿Eso descalifica a Iberico
para presidir el Congreso?
No creo. En algún momento,
inclusive, pensamos invitarlo a la comisión Orellana para que explique su
presencia en el búnker de ese señor, pero no se acordó nada. Lo que estoy
haciendo es contestar una pregunta suya. Yo no lo he divulgado.
Pero se generan suspicacias
porque Ud. también es voceado como candidato.
Bueno, pues, son
coincidencias .
Ud. ha objetado la
candidatura de Iberico por el aval del Apra y del fujimorismo.
Yo he objetado la manera de
imponer una candidatura. No lo objeto a él como persona. Lo que no se puede
hacer es que la bancada más numerosa, la primera minoría, quiera imponer a un
candidato, y que el resto de otras minorías se convierta en un furgón de cola.
¿No se debilita la oposición
presentando dos listas? ¿No le está haciendo el juego al oficialismo?
¿Y por qué le vamos a hacer
el juego al oficialismo? No hay que hacerle el juego ni al oficialismo ni al
fujimorismo. Ambos quieren que apoyemos a sus candidatos. ¿Por qué vamos a
apoyar a un candidato del fujimorismo o del oficialismo?, ¿por qué?
Y por eso proponen un
candidato propio que, sin el fujimorismo o el oficialismo, no tendrá los votos
suficientes.
Probablemente, pero no se
trata de votos más o votos menos, sino de marcar posiciones.
Daniel Abugattás no descarta
apoyar una tercera lista y a usted como candidato.
Será el apoyo de Abugattás,
no del oficialismo. Yo no soy candidato, soy una de las personas voceadas junto
con Vicente Zeballos, Jaime Delgado. No podemos aceptar la imposición de un grupo
que es la primera minoría.
¿No se están dejando ganar
por vanidades y ambiciones en lugar de consensuar?
¿Consensuar con quién? ¿Con
ellos? No quieren consensuar. El consenso se logra con buena voluntad de ambas
partes. Ellos no nos han buscado, no nos han tomado en cuenta para nada y
quieren que nosotros, como corderitos, sigamos a la persona que ellos imponen.
Eso es inaceptable en política.
¿Usted es el candidato
encubierto del oficialismo?
No soy encubierto de nada ni
de nadie. Soy totalmente transparente. No oculto verdades, no miento, no
falsifico, ni soy testaferro de nadie, ni encomendero de nadie, ni mensajero de
nadie.
¿Esa va para Iberico?
No, estoy respondiendo lo
que Ud. me ha preguntado.
¿El fujimorismo le ofreció
su aval para postularlo a la presidencia en algún momento?
En el 2008, fue el único año
que fui candidato y recuerdo haber recibido en mi despacho a representantes del
fujimorismo de aquella época que ofrecían su respaldo a cambio de nombrar a uno
de sus miembros como titular de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales
en momentos que se veían denuncias contra vocales que juzgaban a Alberto
Fujimori. Ese tipo de canjes era inaceptable.
Las comisiones se
distribuyen según proporcionalidad.
La presidencia tiene manejo
para eso. No es que pueda imponerlo, pero tiene una serie de instrumentos para
lograrlo.
AUTOFICHA
“No
sé si postularé a la reelección. Lo veo difícil y complicado por motivos
políticos y personales. Tengo cuatro gestiones parlamentarias. Dicen que no hay
quinto malo, pero eso dependerá de mi partido. Si dicen que no, será no. Yo me
someto a lo que el partido decida”.
“Yo soy militante de Acción Popular desde
que tengo 18 años. Tengo demasiados años en mi partido para salirme y buscar
que me cobijen en otra tienda política. Eso nunca pasará conmigo. (…) Yo soy un
hombre de partido”.
“Este es el cuarto Congreso en el que estoy
y, cada vez que regreso, compruebo que encuentro un Parlamento más deteriorado
y con menos ilustración en sus miembros, pero parecería que eso es inevitable
en un país como el nuestro donde se deteriora todo con el tiempo”.
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