POLICIAL

Esposa de policía asesinado 
pasa de testigo a sospechosa
Investigación. Ana Mabel Silva incurrió en contradicciones al ser interrogada. Sin embargo, jura ser inocente. Hoy sepultarán los restos de Eduar Vega Julca.



Cuando el técnico de segunda PNP Eduar Oswaldo Vega Julca fue asesinado en San Bartolo, su esposa llamó a la Central 105 y dio cuenta del hecho. Vega fue atacado por dos sujetos cuando regresaba a casa. Recibió varios disparos dentro de su camioneta.

Este crimen podría quedar como uno más en la lista de homicidios que ocurren en Lima si no fuera por el giro sorprendente que ha dado: la viuda ahora es investigada como sospechosa de mandar a matar a Vega Julca.

Agentes de investigación criminal se encuentran tras los pasos de los sicarios que cometieron el asesinato por encargo en el kilómetro 50 de la antigua Panamericana Sur.

Ana Mabel Silva Blas jura que es inocente y que amaba a su esposo. No obstante, sus contradicciones habrían sido determinantes para que pase de testigo a sospechosa principal en este delito agravado.

CONTRADICCIONES
En esa condición fue puesta ayer a disposición del Ministerio Público. Ella manifestó que durante el trayecto de regreso a casa su pareja se sintió mal de salud y le pidió que ella conduzca la camioneta.

Dijo que por error se salió de la carretera e ingresó a la antigua Panamericana Sur, y cuando intentó retomar la vía sintió un olor desagradable dentro del carro. El técnico de la Policía notó que sus zapatillas estaban sucias y se las sacó para limpiarlas.

“Fui a la parte delantera de la camioneta, donde me alumbré con las luces de los faros. Empecé a limpiar las zapatillas de mi esposo cuando apareció un sujeto y le disparó. Él estaba en el carro, bajó para defenderse y el desconocido le siguió disparando”, contó a los investigadores.

También indicó: “Me equivoqué de ruta, fuimos por un descampado sin saber lo que iba a pasar. Cuando quise retomar la pista fue tarde”.

INVESTIGAN EL MÓVIL
Con un escenario tan extraño, la primera medida que tomó la Policía fue buscar pistas sobre el móvil del crimen y sus autores en los teléfonos celulares del círculo íntimo. El primer celular revisado fue el de Ana Mabel Silva.

“El entrecruzamiento de las llamadas de los celulares podría abrir el camino hacia el desenlace”, sostuvo un agente a cargo de las pesquisas.

Elías Silva, padre de la detenida, manifestó que Ana Mabel no tenía motivos para mandar a asesinar a su esposo. “Ellos se amaban, con mucho sacrificio iban sacando adelante a su familia”, dijo desconsolado.