SOCIEDAD

Zika, el virus que alarma en Brasil, 

es una amenaza latente para el Perú

En expansión. Diez países de América tienen en sus territorios a la enfermedad. Brasil registra 7 personas fallecidas. Se transmite por la picadura del mismo mosquito causante del dengue y la chikunguña. Minsa toma previsiones.

 

Fiebre leve, sarpullidos, conjuntivitis, dolores de cabeza, dolores musculares y de las articulaciones son algunos de los síntomas de una nueva enfermedad que amenaza con llegar al Perú.

Se trata del virus del zika, un mal que se adquiere por la picadura de un zancudo infectado, el Aedes aegypti, el mismo mosquito transmisor del dengue y la ckikunguña.

Hasta el momento son diez los países que han confirmado la presencia de esta enfermedad con casos autóctonos: Brasil, Chile (en la Isla de Pascua), Colombia, El Salvador, Guatemala, México, Panamá, Paraguay, Surinam y Venezuela.

“El trabajo que nosotros hemos desplegado y que está limitando el ingreso de la enfermedad tiene que ver con la estrategia de vigilancia en la que evaluamos semanalmente cuál es el nivel de infestación en zonas del mosquito”, informó Percy Minaya, viceministro de Salud Pública del Ministerio de Salud (Minsa), a La República.

LA ESTRATEGIA PERUANA

En razón de que no existe una vacuna contra esta enfermedad, el Minsa aplica, según explicó Percy Minaya, la misma estrategia contra el chikunguña para controlar los avances de este mal.

“No se trata de una vigilancia del virus, trabajamos con la etapa previa, que es el control del vector, del mosquito. De esa manera tenemos una intervención mucho más constante”, sostuvo el viceministro.

El 19 de octubre, la Dirección General de Epidemiología del Minsa emitió una alerta epidemiológica preventiva a fin de que los establecimientos de salud públicos y privados del país intensifiquen sus acciones de vigilancia y prevención en sus zonas.

Esto estuvo acompañado de la difusión de las recomendaciones a las personas que se trasladan hacia los países donde el zika ya está presente.

Aplicarse repelente en las partes expuestas del cuerpo cada 4 horas, usar ropa ligera que cubra la mayor parte del cuerpo, dormir en lugares que estén protegidos con mosquiteros y asegurarse de que las ventanas de las habitaciones tengan mallas o mosquiteros son algunos de esos consejos.

Se debe tener en cuenta que ante la aparición de fiebre, sarpullidos (suelen comenzar en la cara y se extienden al resto del cuerpo), dolor muscular, dolor de cabeza y dolor en las articulaciones, conjuntivitis (ojos rojos) y malestar general es necesario que acuda a un centro de salud y evite automedicarse, pues podría ser contraproducente.

YUGO BRASILEÑO

Sin duda es Brasil el país donde el zika ha golpeado más hasta el momento. Tanto que obligó a su presidenta, Dilma Rousseff, a establecer un plan de emergencia debido a las 7 posibles muertes y 1.248 casos de microcefalia en recién nacidos.

Esas malformaciones congénitas en bebés han sido constatadas por la comunidad científica brasilera, al hallar estrecha relación entre las madres gestantes picadas por el mosquito infectado y las microcefalias de sus bebés.

Mientras tanto, Paraguay detectó 6 casos autóctonos en el departamento de Amambay, zona limítrofe con Brasil. México también ha confirmado dos casos autóctonos en sus estados de Chiapas y Nuevo León, adicionales al único caso importado proveniente de Colombia.

¿VIRUS MORTAL?

“El zika en teoría no mata, la muerte es excepcional. El dengue, por ejemplo, es mortal. Pero sí hay que tener cuidado con los niños, adultos mayores y personas con defensas bajas por causa de enfermedades crónicas”, indicó Ciro Maguiña, médico infectólogo de la universidad Cayetano Heredia.

Agregó que, a diferencia del dengue y la chikunguña, el zika presenta menos sintomatología. Además, preocupan a los especialistas las malformaciones congénitas que puede desencadenar.

“Lo importante es controlar el vector, el mosquito, porque la vacuna aún no está disponible”, puntualizó Maguiña.

CLAVES

El virus del zika tendría procedencia africana. Se cree que se inició hace 50 años.

Los antecedentes señalan que en Brasil hubo un primer brote hace diez años y no volvió a aparecer hasta hace unos meses.

Los fetos serían más vulnerables durante los tres primeros meses de embarazo de las madres.

Maricarmen Chinchay – La República