DINI:
Reglaje y chuponeo empezó
en el 2011 con agentes policiales
El
presupuesto se incrementó en 250% en el 2011 y 2013, y cayó la productividad en
75%.

ACCIÓN PARALELA. Simultáneamente a la DINI, un grupo de policías habría realizado labores de inteligencia clandestinas para el gobierno. (USI)
Luego de
seis meses de trabajo multisectorial, la comisión reorganizadora de la
Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) emitió un informe que propone los
nuevos lineamientos de la actividad funcional y estructural de la institución e
intenta justificar el incremento del presupuesto en alrededor del 250% que tuvo
en el 2011 y 2013, así como la caída de la productividad de las acciones de
inteligencia en un 75%.
De esta
forma, el gobierno evita hacer un mea culpa y dar mayores explicaciones de las
acciones clandestinas de reglaje a empresarios, periodistas y parlamentarios,
que fueron denunciadas por los medios.
Pero la
novedad no está en este informe, sino en la información que obtuvo Perú21,
brindada por un oficial de la Policía en actividad con amplia experiencia en el
campo de inteligencia operativa. Este agente, quien no quiso ser identificado
para evitar represalias, laboró también en la DINI durante este gobierno.
Según el
policía, es importante que las autoridades investiguen a los oficiales que
trabajaron en el 2011 en la Dirincri.
Relató que
en esta dirección especializada trabaja un coronel que, con un grupo operativo,
desarrolló acciones de inteligencia no autorizada para el gobierno. La orden,
según el policía, fue reglar y chuponear a personas incómodas o que serían
potenciales amenazas al entorno presidencial. Para ello, nuestra fuente dio
detalles de los hechos acontecidos en el 2011 y 2012 contra integrantes de la
familia Ávila en el distrito de Ventanilla, quienes fueron testigos del caso
Madre Mía, por el cual fue acusado el entonces ‘capitán Carlos’ –identificado,
según testimonios recogidos por la Comisión de la verdad y Reconciliación, como
Ollanta Humala Tasso-.
Asimismo,
nuestra fuente enfatizó que las acciones ilegales continuarían desde la
Dirección de Inteligencia de la Policía (Dirin), donde se coordina con un
oficial de extrema confianza del gobierno que hace el doble trabajo. Revisen
–dijo– los planes de operaciones, los gastos realizados y los pagos que se
hacen a los informantes. Según el testimonio policial, ahí se va a encontrar la
respuesta. Y es que habría hechos inexistentes que están plasmados en
documentos oficiales.
Culminó su
declaración destacando que se han instalado decenas de cámaras de seguridad en
todos los pisos del edificio sede de la Dirin, que registran el ingreso y
salida de los vehículos y personas, pero subrayó que no todos los que ingresan
al edificio trabajan ahí. De igual manera, hay militares que están asignados en
diferentes unidades policiales que recopilan información, la cual no es
derivada a los órganos de inteligencia.
OPINAN LAS
VÍCTIMAS
Respecto del
informe de la comisión reorganizadora de la DINI, el congresista Víctor Andrés
Belaunde, víctima del accionar de los agentes de inteligencia, señaló: “Me
parece que es un cambio semántico, nada más. Dicen que van a empezar a trabajar
mejor, pero no veo cambios sustanciales”.
Enfatizó que
le preocupa que no acepten su responsabilidad y “lo que es evidente es que los
objetivos, las estrategias y las órdenes aplicados hasta el día de hoy son
equivocados”.
Destacó que
los reorganizadores no quieren reconocer en su informe la culpa y
responsabilidad de la DINI y están tratando de desviar la atención. Pero lo
fundamental, añadió, es que funcionó mal el sistema de inteligencia, habiendo
triplicado su presupuesto. “¿Quién le dio a la DINI las órdenes de chuponear y
reglar a periodistas, empresarios y políticos?, ¿por qué se hizo y quiénes son
los responsables?”, cuestionó García Belaunde.
Planteó la
concurrencia de los ministros de Defensa e Interior al Congreso para que
aclaren las dudas sobre este informe.
Por su
parte, el ex nacionalista Rogelio Canches, presidente de la Comisión de Ética,
expresó su protesta porque la comisión no le ha hecho llegar hasta el momento
ningún documento, pues él también fue víctima de la DINI.
“Los
congresistas que fuimos reglados esperamos un mea culpa del gobierno, pero
nada”, manifestó.
Asimismo,
advirtió que, como presidente de la Comisión de Ética, es importante evaluar el
rol que cumplió la congresista Ana Jara, presidenta del Consejo de Ministros
cuando se descubrieron las acciones ilegales de la DINI. “Vamos analizar si la
sometemos a una investigación por falta ética”, puntualizó.
PROPUESTAS
La comisión reorganizadora de la DINI
precisó en su informe que la principal función de esta entidad es ser el órgano
rector de inteligencia estratégica.
Propone la creación de las direcciones de Inteligencia Estratégica-Frente Externo y de Inteligencia Tecnológica.
Plantea la carrera profesional de
inteligencia y la Escuela de Nacional de Inteligencia, promoviendo la
incorporación de sus propios agentes, y organizar los cursos de formación.
La Secretaría General se encargaría de los
aspectos administrativos.
Perú21 llamó por teléfono reiteradamente a la Dirección de Información de la PNP y le envió un mail para conocer su versión. Al cierre de esta edición, no obtuvimos respuesta.
Por Carlos
Neyra (carlos.neyra@peru21.com)
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